Los primeros anillos de boda se remontan a los antiguos egipcios, cuando intercambiaban anillos hechos de cañas trenzadas y cáñamo. Colocaban estos anillos en el dedo anular de la mano izquierda porque creían que había una "vena de amor" que iba desde este dedo directamente hasta el corazón.
Al igual que hoy, era un "anillo de amor" y se usaba para simbolizar el compromiso mutuo. Los egipcios también vieron el círculo como un símbolo poderoso y se dice que el círculo interminable de un anillo de bodas muestra una promesa de siempre.
Los antiguos griegos y romanos también usaban anillos y los primeros estaban hechos de cuero, hueso o marfil. Fue en esta época que comenzó la tradición de las alianzas de metal y se empezaron a usar anillos de boda de hierro. Para aquellos lo suficientemente ricos, también vimos el comienzo del uso de anillos de oro y plata para marcar un matrimonio.
No pasó mucho tiempo antes de que se empezaran a personalizar los anillos de boda. Durante el Imperio Bizantino los anillos estaban grabados con figuras de la pareja. En el siglo XV se hicieron populares los "anillos Posie". Se podía inscribir un verso corto en el anillo y, a medida que pasaba el tiempo, los mensajes se volvían más personales, y se añadían grabados en el interior del anillo para mantener el mensaje privado y cercano al usuario. Muchas parejas todavía optan por añadir un grabado a sus anillos para darle un toque verdaderamente romántico.
Además de convertirse en anillos de boda más personales, también se volvieron más elaborados con el paso de los años. En la época medieval, los anillos de boda mostraban dos manos entrelazadas con amor. Sin embargo, los anillos Gimmel de los siglos XV al XVII son quizás los más complejos hasta la fecha. Estaban formados por 2 o 3 bandas entrelazadas que, cuando se usaban juntas, formaban un anillo completo. Con los primeros diseños, la novia y el novio usarían cada uno una banda en el período previo al día, y luego, en la boda, la novia los usaría como un solo anillo para indicar la unión.
Ahora bien, no existen reglas cuando se trata de anillos de boda. Las parejas todavía tienden a usarlos en el anular de la mano izquierda, inspirándose en la vena egipcia del amor, y además siguen siendo un círculo interminable sin principio ni fin. Sin embargo, ahora las parejas tienen más libertad para elegir los estilos que más les convengan.
Además de las tradicionales alianzas lisas, también puedes optar por alianzas con diamantes engastados para añadir un poco de brillo.
